La confusión sexual en un clic

Conoce Celada^™ VMB 180

Uva de mesa y uva de vinificación

para el control del melazo de la vid (Planococcus ficus)

Es el difusor de feromona de última generación mediante confusión sexual de Suterra^®. Su tecnología única permite una liberación continua y estable de feromonas que garantiza un año completo de duración.

Innovación

Máxima protección durante todo un año.
Emisión continua y estable incluso a elevadas temperaturas.
Fácil y rápida instalación gracias a su gancho adaptable.
Protección discreta, se mimetiza con el viñedo.

Calidad

Minimiza la aparición de fumaginas.
Incrementa la obtención de uva limpia y sana maximizandosu valor comercial.

Sostenibilidad

Aliado de polinizadores y enemigos naturales.
Compromiso de parcela limpia.
Indispensable en estrategias de gestión integrada de plagas.
Apto para uso en agricultura ecológica.

suterra-celada-VMB-180-V5-COLOCACION-Cuadrada

Nº Registro

ES-01553

Dosis recomendada

500 unidades/ha

Unidad mínima

1 bolsa | 252 unidades

1 caja | 4 bolsas

Producto apto para agricultura ecológica
de acuerdo al Reglamento nº (CE) 1165/2021.

Producto reciclable por:

Reducción de daños

Celada^TM VMB 180 necesita una dosis menor que otros difusores. Emite feromona de manera continua y estable durante todo el año, independientemente de la temperatura.

Ficha Técnica

Guía de Colocación

Recomendaciones de colocación

Colocar en el alambre de las espalderas o en pulgares según conveniencia.
Retirar tras cada campaña.

Identificación de Melazo de la vid

(Planococcus ficus)

Melazo de la vid

(Planococcus ficus)

Uva de mesa, uva de vino

Inspeccionar el viñedo en busca de melaza y hormigas.

Monitorizar la efectividad de la confusión sexual usando trampas con cebo de feromonas sexuales.

Aplicar trampas de monitoreo al inicio de la campaña.

Colocar 1 trampa cada 4-10 hectáreas. Colocar al menos 2 trampas por parcela.

Revisar las trampas semanalmente y cambiar el cebo cada 4 semanas.

Inspeccionar el viñedo en busca de huevos y daño después de cada vuelo.

Las larvas producen daño directo sobre las bayas al alimentarse de ellas.

Los daños de la plaga en la fruta pueden derivar en podredumbre.