Las plagas y los temporales reducen un 20% la producción de caqui

La recolección de caqui todavía no ha llegado al 25% de lo que se espera cosechar a lo largo de los próximos meses, pero ya se puede apreciar que la campaña 2021 será atípica.

Destacará por la baja producción debido a la confluencia de dos fenómenos que han causado importantes daños en la cosecha: la plaga del cotonet y los intensos temporales de septiembre que afectaron al epicentro de la producción del caqui, la Ribera del Júcar.

Hablamos con Paco Borrás, experto en el mercado hortofrutícola que nos esboza las previsiones para la presente campaña.

Paco, una campaña 2021 en la que se prevé una importante reducción de la producción.

Así es, hay organizaciones agrarias que hablan de hasta un 25% menos de producción de caqui en la presente campaña. Es pronto para saber la cifra total, pero si lo habitual es alcanzar las 400.000 toneladas, es muy probable que este año no se llegue ni a las 300.000.

¿Cuáles han sido los factores para que se dé esta producción tan baja?

Sin duda han coincidido dos causas importantes, la expansión de la plaga de cochinilla algodonosa (cotonet) y los fenómenos climáticos. En septiembre se registraron episodios de fuertes lluvias y granizo en la Ribera del Júcar, la principal zona europea de producción de caqui.

Antes de iniciarse la campaña ya se observó que habría campos enteros que no se podrían recolectar y todo esto agravado por el hecho de las últimas prohibiciones de materias activas que han impedido realizar tratamientos masivos que fueran efectivos de forma inmediata contra el cotonet.

Estas circunstancias solo vienen a agravar la situación ya que los dos últimos años digamos que no podemos hablar de resultados buenos en las campañas de caqui, lo que hizo que algunos agricultores bajaran la guardia a la hora de atender bien sus campos y prepararlos para evitar la acción de las plagas.

También se ha detectado esta campaña que la maduración en el árbol va más lenta que en años precedentes. Las razones pueden ser un verano más templado con tardes de agosto de temperaturas por debajo de lo habitual o las propias lluvias de septiembre que han podido ralentizar el proceso de maduración del caqui.

¿Cómo afectará esto al mercado del caqui?

Una bajada de producción siempre hace que los precios suban, pero es cierto que este año los costes se han elevado debido la mayor necesidad de gasto en fitosanitarios.

Los almacenes de las cooperativas que están en estos momentos operando con caqui van están trabajando con la mitad de volumen de producto respecto del año pasado por estas fechas. Hablamos de las que se sitúan en las zonas más afectadas por el pedrisco, aunque el resto hoy no superan el 60 o 70% de volumen.

La campaña comercial, en principio, no tiene malas perspectivas, si tenemos en cuenta que el mercado europeo tiene ganas de fruta nueva. La premisa desde el sector comercializador es alargar todo lo posible la temporada y llegar con volúmenes comerciales hasta principios de enero.

¿Cuáles son las perspectivas de precios?

Los precios están aguantando mejor que el año pasado a fecha de hoy. Durante las 20 campañas que llevamos de caqui siempre ha habido una curva de precios en forma de campana de Gauss invertida. Lo que implica que empiezan elevados, van descendiendo hasta una zona de meseta y a final de campaña vuelven a subir. Pues bien, el éxito de la campaña en muchas ocasiones viene dado por cuán alta es esa meseta. Todo el mundo está luchando para que los actuales precios que están por encima del año pasado sean ya la meseta. En estos momentos el kilo de caqui de categoría primera en salida de almacén bien confeccionado está entre 1 y 1’20€.

Es difícil hacer una previsión concreta del valor de mercado porque la campaña se extiende hasta enero y es pronto para saber cuál será el comportamiento final de los precios.

¿Qué otras plagas afectan a los caquis?

Históricamente la principal plaga a combatir por los productores de caqui era la mosca mediterránea de la fruta. Ha habido épocas en que ha sido un problema grave porque en el momento en que el caqui tomaba color era víctima de una deposición de larvas. Hubo un tiempo que se hacían tratamientos insecticidas masivos. Hoy en día hay dispositivos innovadores como Magnet^TM MED que mediante su sistema Attract & Kill mantiene controlada a la población de mosca de manera sostenible y afortunadamente la Ceratitis capitata ha dejado de ser un grave problema, al menos en la campaña actual.

También afecta al caqui el hongo Mycosphaerella nawae que produce una necrosis foliar en el árbol. En resumen, cotonet, mosca de la fruta y Mycosphaerella nawae son las tres principales plagas que ha de prevenir cualquier productor de caquis.